América es cada día más considerado como un foco de oportunidades para las empresas españolas. El financiero con un 33%, seguido por las telecomunicaciones y la distribución de energía son los sectores que más se decantan por la internacionalización en el continente americano. Con ello, prevén aumentar los beneficios obtenidos en mayor cuantía que lo que obtendrían a nivel doméstico, en un periodo aproximado de 3 años. El país más valorado es Brasil, recibiendo un 6% de la inversión nacional. Sao Paulo por su parte, es la metrópoli más apreciada para llevar a cabo las operaciones comerciales, seguida de cerca por Bogotá y Miami.

Resulta de gran importancia recalcar dentro del continente el papel de EEUU como principal socio comercial de España fuera de la UE, además de Canadá y México, como representantes de la parte Norte del continente. Los sectores que más afluencia reciben por parte de empresas españolas son: la banca minorista, las energías renovables y las infraestructuras. Son muchas las multinacionales que ya se encuentran allí, destacando uno de los grandes bancos españoles que ya se ha convertido en el banco oficial de la NBA, la liga de baloncestoamericana que tiene gran importancia no solo en el país estadounidense sino también a nivel mundial.

Brasil como ya hemos mencionado es uno de los países que resulta más atractivo para las empresas españolas. Esto se debe al importante crecimiento económico que ha experimentado el país y que continua, encontrándose ya entre las 10 economías más importantes del mundo. El cambio que ha sufrido en muchos de los ámbitos y hábitos sociales, seguido del aumento de la clase media en el país ha supuesto un punto clave para atraer inversión extranjera. España se presenta como el segundo país inversor en Brasil, siendo su primer mercado de exportación en América Latina en 2013 con 7.220 PYMES. Los sectores principales donde se concentra la inversión son: telecomunicaciones, infraestructuras, servicios financieros y tecnología de la información.

Otro de los países que ha recibido recientemente una gran inversión española es Perú. España es de hecho el primer país inversor allí con un 22,78%. Los sectores en los que se concentra de manera prioritaria la inversión directa en el estado andino son: construcción y tratamiento de aguas, energía, telecomunicaciones y finanzas. También están teniendo mucho éxito las actividades relacionadas con el comercio, servicios, transporte aéreo, hoteles y seguros. Todo ello es debido a una mejora en las políticas internas del país, una mejor calificación por parte de las agencias de rating y el hecho de que la importancia de la corrupción ha pasado a un segundo plano gracias a la lucha contra la misma que ha sido fundamental para relanzar la actividad comercial del país.

El crecimiento de Colombia y el aumento de la clase media convierten al país en un claro objetivo para la inversión nacional. Prueba de ello son las ya más de 300 empresas españolas que están instaladas en el país. Según el VII Informe Panorama de Inversión Española en Latinoamérica de 2014, los países de la Alianza del Pacífico, entre los que se encuentra Colombia, son los que mejores perspectivas económicas muestran para las empresas españolas. Según el Observatorio de Multinacionales en América Latina (OMAL) todas las grandes multinacionales españolas están ya en el país.

Finalmente aunque no por menos importantes, se encuentran Chile y Argentina, como dos de los países del continente de entre los diez primeros donde la inversión española es más cuantiosa. Se encuentran por detrás de Brasil, Colombia, México, El Salvador y EEUU. Los sectores que más dinero reciben son: agroindustria, industria alimentaria, química, petroquímica, bienes de consumo, turismo, infraestructuras, mobiliario urbano, gestión de residuos urbanos, energías renovables, sector financiero, servicios públicos y consultoría. Cuentan con un organismo llamado ProsperAR que facilita información y trata de promover la implantación de empresas dentro de estos países. En Chile somos el tercer mayor inversor después de EEUU y Canadá, con un 17,6% del total, concentrado principalmente en la construcción, ingeniería y energía renovables.

Como podemos ver el papel que juega el continente es crucial en la recepción de inversión nacional, y resultado de ello ha sido el crecimiento de los denominados BRICS ó países que durante los últimos años han experimentado un crecimiento exponencial dentro del continente americano. Junto a todo ello se han sumado las políticas internas que han venido implementando estos países dedicadas a la lucha contra la corrupción y la violencia, factor de riesgo para aquellas empresas que antes quisieran invertir en el extranjero, lo que ha supuesto un punto de inflexión para recibir inversión nacional y también para el desarrollo de los mismos. Aunque en la actualidad existe una tendencia a creer que el crecimiento de estos países ha cesado, es importante tenerles muy en cuenta porque esto no solo no es así, sino que ahora que han experimentado un crecimiento y que su poder adquisitivo es mayor, es el momento de dirigirnos a ellos fundamentalmente explotando aquellos sectores en los que somos líderes a nivel nacional: infraestructuras, construcción, banca y turismo. Como hemos extraído de este reportaje, las grandes multinacionales ya cuentan con presencia en los principales países, por ello es importante que no dejemos de prestar atención a todas aquellas medianas y pequeñas empresas que son menos conocidas pero que están expandiéndose y miran al futuro con ambición e ilusión por explorar nuevos mercados. Por ello, es clave facilitarles los medios e instrumentos para hacerlo factible y convertir en un hecho su internacionalización, y así facilitarles su labor.

Lucía Garzón